Sin ver la lluvia crecer
Hoy llueve,y tristemente no he podido ver cómo lo hacía.
Me encantan estos días, con ese toque de magia que les acompaña.
Porque cuando llueve no puedo evitar salir a la calle y no alegrarme por el olor a humedad en las calles,por esa gente corriendo intentando no mojarse,por esos niños que se divierten saltando charcos...
Pero ante todo,es esa sencación de tranquilidad que me llena por dentro.
De pequeño,cuando llovía,salí a la calle,y dejaba que las finas gotas de agua recorriesen mi rostro,acariciasen mis mejillas y besasen mi piel.
Aún disfruto haciéndolo.
¿Qué es lo que hace tus momentos especiales?
-El saber que un día,pueden dejar de serlos.