Me pregunto, ¿qué tal será escribir bajo las estrellas? o mejor aún, ¿qué tal en una cueva subterránea con un pequeño lago en su interior? incluso podría pedir todavía más, ¿qué tal sentado bajo la lluvia?
Son tantas las preguntas que me hago que no tengo tiempo para pensar en todas ellas.Tiempo.De ese que no tengo para comprar.
Aunque la verdad es que regalo el tiempo,se lo regalo a los demás.
No me importa no poseer tiempo para mí si ese tiempo les sirve a los demás.
Me siento bien.Disfruto de ello,y disfruto de cada minuto bien invertido.
Llevo todo el día arañando segundos al reloj,para luego,sentarme en el sofá y mirar la tele.Sólo mirarla,porque me entretengo mientras pienso.
¿Y en qué pienso? En mucho y en nada a la vez.
Pienso en personajes que rebosan sufrimiento,en personajes a los cuales les falta un matiz para ser creíbles.
Pienso en mágicas historias,donde no todo sale al final como se espera.
En que mientras pienso,puedo escribirlas,pero por una extraña razón no lo hago.
Busco una historia que exprese lo que siento,pero no me identifique plenamente con ella.Quiero que sea mía y del mundo a su vez.
Tanto,y tan poco.
A tí,si has llegado hasta aquí,gracias por regalar parte de tu tiempo en leerme.Puede que para algunos no valga nada,pero un minuto leyendo algo mío,es dármelo a mí.Y eso,queráis o no,me alegra el día.